Originaria de Centroamérica, fue básica durante siglos en la alimentación de Mayas y Aztecas.
Lo especial de esta pequeña semilla es su gran contenido en ácidos grasos esenciales Omega 3: el 64 % de su contenido graso, lo que la convierte junto a la semilla de lino en la mejor fuente de ácido alfa-linolénico del mundo vegetal.La Chía, al igual que el lino, es un excelente aliado contra las enfermedades cardiovasculares, ya que sus grandes cantidades de Omega 3 hacen aumentar el tiempo de coagulación de la sangre.
Ayuda a reducir el colesterol malo debido a que sus ácidos grasos poliinsaturados movilizan las grasas saturadas.
Gran antioxidante. Contribuye a la regeneración de los tejidos.
Por su alto contenido en fósforo beneficia a los nervios, a la actividad cerebral y fortalece la memoria.
Continuará...