22 de junio de 2011

Alimentación sana y natural

 por carlota elena guerrero

     Alimentación natural o naturista es una forma de comer basada en alimentos vegetales tal y como los ofrece la naturaleza.

       Los pueblos primitivos padecían menos enfermedades degenerativas debido a que se alimentaban de una forma natural comiendo frutas frescas recién cortadas con todas sus vitaminas; verduras recolectadas directamente de la naturaleza o cultivadas sin ningún tipo de producto químico; cereales integrales, etc.
       La Naturaleza nos incita a través de los sabores a comer lo que el cuerpo necesita. Así, cuando nos falta energía deseamos algo dulce, porque los alimentos dulces nos aportan energía. El sabor dulce en la naturaleza se encuentra principalmente en las frutas las cuales contienen azúcares en las cantidades que nos son saludables. Los seres humanos hemos conseguido extraer el azúcar de las frutas y otros vegetales y con ella confeccionar todo tipo de dulces de los que disfrutamos y abusamos. Una porción de torta nos aporta hasta 10 veces la cantidad de azúcares que nos brindaría el mismo peso en fruta, imagínense! comerse 10 manzanas de una sola vez!! Por eso engordamos, el cuerpo se llena de mucosidades y nos ponemos enfermos. Un sólo pedazo de torta de vez en cuando no basta para enfermarnos porque el cuerpo resiste este ataque, pero si lo hacemos repetidas veces, la enfermedad es ineludible.

Azúcar blanco: el gran desmineralizante del organismo
A diferencia de la caña de azúcar y la melaza, el azúcar blanco refinado ha perdido todas las enzimas y minerales necesarios para su correcto metabolismo y absorción. Una vez en el cuerpo, grandes cantidades de calcio, vitB1 y otros minerales son necesarios para suplir la deficiencia. Estos minerales son obtenidos principalmente a partir de los huesos y los dientes.
Consumir grandes cantidades de azúcar acidifica la sangre. El cuerpo, para recuperar el equilibrio ácido-base trata de alcalinizar la sangre aportándole calcio que extrae de los huesos y de los dientes.

Según la Medicina china los sabores guardan relación energética con los diferentes órganos del cuerpo (Clasificación de los alimentos según la MTC). El sabor dulce está relacionado con el Estómago y el Bazo, el sabor salado con los Riñones y Vejiga, etc. El consumo de pequeñas cantidades de un sabor determinado tonifica el órgano con el que se relaciona pero un exceso de ese mismo sabor lo deteriora. Por ejemplo el sabor dulce consumido moderadamente tonifica la función del estómago, pero el exceso de dulces lo daña y produce acidez.

Cuidado con el exceso de agua
Otro elemento natural vital del que se suele abusar, muchas veces por recomendación médica, es el Agua. Si bien el agua es la mejor bebida y el mejor limpiador y desintoxicante del cuerpo, no se debe abusar de ella. Beber agua regularmente es importante y saludable, pero beber más de lo que pide el cuerpo no es necesario ni beneficioso puesto que los riñones tendrán que trabajar más. El cuerpo es como una máquina: cuanto más trabaja, más se agota. Las cantidades de agua que nuestro cuerpo necesita la determina el hipotálamo, el cual nos avisa de esa necesidad a través de la sed.
La Medicina china distingue entre dos modalidades de sed: 1) tener sed con ganas de beber o 2) tener sed sin ganas de beber. Esto último se debe a que a veces el cuerpo tiene suficiente humedad dentro pero además tiene calor, entonces el aviso es: tengo sed (por el calor) pero no necesito beber. En este caso hay que proporcionarle al cuerpo algo que lo refresque más que hidratarlo, por ejemplo una taza de té verde que refresca y hace orinar (para eliminar el exceso de humedad) o simplemente algo que refresque por ejemplo una pera, una manzana o una porción de sandía o melón, pepino, etc. todos ellos de naturaleza fresca. Si tenemos sed con ganas de beber entonces sí tomaremos agua suficiente.

La desnaturalización de los alimentos
Hemos hablado del abuso, hablemos ahora de la desnaturalización de los alimentos.
Algunas de las prácticas que desnaturalizan los alimentos son: 

* El refinamiento de los cereales: en el salvado ó cáscara exterior de los granos de cereal se encuentran grandes cantidades de vitaminas, en especial del complejo B que se pierden con el refinamiento. El salvado también es importante como fibra para ayudar al peristaltismo intestinal y evitar el estreñimiento, un mal muy difundido hoy en día. Es recomendable por lo tanto consumir los cereales integrales con toda su fibra o parcialmente descascarillados, aquellas personas con intestinos sensibles. El germen del trigo es otro elemento que se pierde con el descascarillado del grano, muy importante por sus propiedades nutritivas y función antioxidante debido a su contenido en Vit E.

* La recolección verde de las frutas y verduras, su almacenamiento en cámaras y su consumo luego de mucho tiempo, nos ofrece un alimento desvitalizado, sin "prana" (energía vital) y con sus vitaminas y minerales reducidos. Para evitar esto es mejor consumir frutas y verduras de la época y del lugar. Si fuera posible, buscar en el mercado aquellos vendedores que cultiven sus propios productos. Los alimentos, cuanto más frescos sean más vida nos aportarán.

* El procesamiento y envasado de los alimentos, preservados muchas veces con conservantes cancerígenos los desvitaliza y los vuelve tóxicos. Es mejor evitarlos por todos los medios. Estos son: conservas en latas, en frascos, en cartones o bricks, etc. Bebidas azucaradas. Tampoco son aconsejables los alimentos congelados porque aunque conservan la mayor parte de sus nutrientes se desvitalizan por el largo tiempo de conservación.

* El exceso de cocción de los alimentos y el uso de colorantes y saborizantes químicos desnaturalizan los alimentos. Cuidado con el "glutamato" que contienen algunos productos saborizantes. El Glutamato es un neurotransmisor del sistema nervioso central y existe muchísima polémica en torno a su uso en la alimentación. Está comprobado que produce por ejemplo una voracidad inagotable. Ante tanta duda nos debemos plantear: ¿es realmente necesario que yo consuma esto? si lo puedo suplir con tantas hierbas y especies naturales, ¿para qué arriesgarme? 

Productos químicos contaminantes
Los fertilizantes y pesticidas contaminan los alimentos con productos que son tóxicos y por tanto nocivos para la salud. La razón que dan los organismos sanitarios para permitir su uso es que "las cantidades residuales en cada pieza que consumimos no son suficientes para matarnos". 
Pero sumemos a los tóxicos de los alimentos: 1) los contaminantes del aire que respiramos en las grandes ciudades provenientes de las industrias; 2) los residuos tóxicos del agua que consumimos ya sea por provenir de napas freáticas contaminadas con residuos químicos o por un agua de grifo "reciclada" a partir de un agua cuyo origen preferimos desconocer;  o agua purificada con sustancias químicas; 3) los tóxicos provenientes de la cantidad increíble de productos químicos que usamos a diario para hacer nuestras vidas más "asépticas": fregasuelos; detergentes; lejía; desengrasantes; desodorantes ambientales; abrillantadores; jabones de todo tipo; mata moscas, mosquitos, cucarachas, etc. Productos de higiene personal:  jabones y geles de baño; shampoo, acondicionador para el pelo, tintes; perfumes; cremas corporales, crema de manos, crema de cara, cremas nutritivas, contorno de ojos, de limpieza, desmaquillante; maquillaje de todo tipo ... y un muy largo etcétera al que hay que añadir la forma elegida por muchos para auto-envenenarse y envenenar a los que le rodean: el cigarrillo.
Por supuesto ninguno de los contenidos tóxicos de estos productos por separado es suficiente para matarnos pero sumados todos ellos con el agravante de estar expuestos a diario .... no es de extrañar que haya tantas nuevas enfermedades y alergias hoy en día, muchas de origen "desconocido".
Los dos órganos que más sufren la intoxicación son el hígado y los riñones: filtros depuradores del organismo. 

No es raro oir decir: "le tengo alergia al polen"; el polen es algo natural, está en la naturaleza, ¡cómo se puede ser alérgico al polen! ¡Es absurdo que las flores nos hagan daño y no todo lo demás! Más bien tendríamos que decir: mi organismo está agotado de tanto metabolizar químicos que ya no tolera ni el polen de las flores! 

 Cuanto más nos acerquemos a una forma de vida natural, el cuerpo, la mente y el espíritu lo agradecerán, nos sentiremos revitalizados y podremos disfrutar de la vida en total plenitud.

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